Hay por lo menos dos, hay escritores que parten de una situación inicial, para sentarse a escribir, y otros – entre quienes me incluyo – no lo hacemos, hasta no tener por lo menos los trazos generales del desarrollo de la historia, en la mente. Es decir, el escritor “situacional” se sienta a describir una primera escena, sin la menor idea, quizás, de qué es lo que se derivará de ahí. En cambio, un escritor más argumental lo hará con el inicio, desarrollo (y algunas ramificaciones, quizás) y final (o por lo menos varias posibilidades entre varios finales), en la mente. El otro día oí hablar al escritor Juan Saturain, en el programa de TV Puerto Cultura , de canal 9 de Buenos Aires, describiéndose a sí mismo como a un escritor situacional, y diciendo que la falla en escribir de otra forma, la historia “de corrido”, radica en que más tarde o temprano el desarrollo se vuelve previsible, uno empieza a adivinar más o menos en qué capítulos, a qué altura del libro reaparecerán personajes d...